ritmo en los barrios: balance calendario

¡Muy buenas noticias! La segunda edición del calendario de Ritmo en los barrios ha sido un gran éxito, e incluso hemos superado las cifras del año pasado. Los calendarios se siguen vendiendo en cuentagotas, pero a día de hoy, las cifras son de 765 vendidos lo que supone un ingreso de 9075 dólares.

El objetivo principal de la venta de calendarios era conseguir los fondos necesarios para poder seguir pagando los salarios de los profesores, y esta increíble cantidad nos permite seguir con prácticamente la misma plantilla del año pasado durante el que ya se hizo un trabajo fantástico (seis profesores locales más un servidor).

Solo ha habido un par de cambios; el puesto de profesor de guitarra que este año ocupa Juan Francisco Centeno, y el de profesor de trompeta que de momento lo desempeña el voluntario alemán Jonathan Hoelzle, mientras seguimos a la espera de incorporar otro profesor local. Durante el inicio de curso tuvimos también con nosotros la voluntaria Louise Porter de Estados Unidos dando clases de canto, y está previsto que durante los próximos meses tengamos aquí unos cuantos voluntarios más.

A pesar de que, en un principio, para este año no nos habíamos marcado el objetivo de ampliar el proyecto a más escuelas, sino que queríamos consolidarlo en las siete en las que trabajamos el año pasado, finalmente los fondos conseguidos nos han permitido incorporar permanentemente en nuestro programa dos escuelas en las que el año pasado ya habíamos colaborado esporádicamente: Juan Diego y Salomón de la Selva. Con estas dos, ya son nueve en total, y en ellas tenemos más de 600 niños recibiendo clases de música, lo cual nos llena de satisfacción. En el resto de escuelas que tenemos en “lista de espera” esperamos poder ir haciendo alguna que otra colaboración durante el año.

Aprovechamos para dar las gracias, una vez más, a Marc Virgili por el tremendo esfuerzo en la elaboración del calendario, así como a todos los ex-voluntarios, familiares y amigos que ayudaron a distribuirlos, y, por supuesto, a todos los que lo compraron.

(Foto: La escuela Salomón de la Selva se encuentra en unas condiciones de lo más precarias. Está hecha de madera y dispone de una sola aula para los 6 grados de primaria más el pre-escolar).

Después de un inicio un poco complicado, ahora el curso evoluciona favorablemente a pesar de que Ritmo en los barrios se encuentra en un año de transición. Tras casi cinco años en Nicaragua, este es el último en que voy a trabajar para el proyecto desde aquí y en el futuro lo voy a hacer desde Barcelona. Antes de que termine este año escolar, un profesor local quedará encargado de coordinar el trabajo en las escuelas, así que ahora nos estamos preparando para que este momento de cambio sea lo menos traumático posible.

Los planes de futuro más inmediatos son, aparte de estar ensayando para los conciertos que vamos a hacer en todas las escuelas para celebrar el "Día de la Madre" el próximo 30 de mayo (una festividad muy importante en Nicaragua), nos estamos preparando para participar en un concurso organizado por Project Ahimsa, una organización norteamericana, que ya nos había apoyado anteriormente.

Project Ahimsa ha pedido a los más de 40 programas de Eduación Musical a los que apoya en todo el mundo, que le mandemos una grabación con la música que hacen nuestros estudiantes. Las diez mejores canciones se incluirán en un álbum que se distribuirá a nivel mundial con el objetivo se conseguir fondos para seguir apoyando estos programas. Ritmo en los barrios no dispone de ninguna grabación profesional, pero la propia fundación nos ha donado $350 para que podamos afrontar los gastos que suponen grabar un CD en un estudio. Al margen de la posibilidad de ser seleccionados para el álbum, estamos muy contentos de que un grupo de nuestros estudiantes tenga la oportunidad de asistir a un estudio de grabación profesional. ¡Sin duda que serà una experiencia para toda la vida!

(Foto: Alumnos de la escuela Ángela Morales muestran los instrumentos que rcibieron del CEIP Salvador Espriu de Badalona).